The power of networking
We are true believers that traveling traces your destiny with the aim of meeting someone or several people that, somehow, will brand you for life. In all my travels around the world, the ones which I enjoyed the most were thanks to recommendations from old friends and also from “new acquaintances”.
Our travel style works in our clients’ subconscious so that they are predisposed to meet interesting people, therefor most of our proposals include guides or people specifically selected with the only goal that they fully enjoy their experience.
For example, when our clients choose a cooking class, we try it host it at someone’s house where the owner has something in common with them. Last year a couple of architects wanted to learn to how to cook Spanish tapas, so when they went to Seville, we organized a tapas workshop in a very nice venue of a famous designer, who was also part of an aristocratic family. It was a great evening! Nowadays, they still keep in touch and, to my regret, the last time they came back to Seville they called me just to say hello!
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Somos fieles creyentes de que viajar traza tu destino con el objetivo de conocer a alguien o a varias personas que marcarán de alguna manera tu vida. En todos mis viajes por el mundo, los que mas he disfrutado han sido gracias a recomendaciones de amigos de muchos años y también de amigos “recién conocidos”.
Nuestro estilo de viaje trabaja en el subconsciente de nuestros clientes para que estén predispuestos a conocer gente interesante. La mayoría de nuestras propuestas incluyen a guías acompañantes o personas elegidas puntualmente para disfrutar al máximo de la experiencia.
Por ejemplo, cuando nuestros clientes eligen una clase de cocina, esta será en casa de una persona con la que intentamos que tengan cosas en común. El año pasado una pareja de arquitectos quería aprender a hacer tapas españolas, así que durante su estancia en Sevilla organizamos un taller de tapas en la casa de una conocida diseñadora, además de ser de familia aristocrática. ¡La velada fue un éxito! Hasta el día de hoy siguen en contacto y, para mi pesar, la última vez que volvieron a Sevilla me llamaron ¡solo a saludar!